Por Sonia Cienfuegos

(A Cristóbal)

Ainos a Charles (Bruselas)

Objet:                     Anochece en Providencia y Thayer Ojeda, anochece en Santiago, anochezco yo

Querido Charles: Ahora tú duermes mientras yo

trabajo. En la madrugada de Santiago, tú trabajarás y

yo dormiré. Voilà.

 

Te extraño. Tengo pensión por ti o de ti. No soy

experta en asunto de pensiones, sólo sé que es como¡

huuuuuuumffffffff¡ o solo ffss sin fuerza. Tampoco soy

licenciada en extrañadas pero algo se le hace. Al

anochecer en Santiago me viene un suspiro santiaguino

como debe ser e intuyo como será en Lima o en Bruselas

o en los sueños donde se confunden las estaciones, los

días, las noches; las personas aparecen tras nuestro

cristal. El catalejo nos recuadra el miedo y el amor

se instala en la ventana pensativo y al acecho

esperando la vigilia para atacar y dejarnos lánguidos

de recuerdos e hinchados de preguntas fusionando

fantasía y realidad en un solo globo, mismo que

desinflaremos en la mañana bajo la ducha cuando nos

diremos que es igual porque ¿dónde empieza una y dónde

la otra? Pronto pasará el camión recogiendo basura y

sabré que es tarde y que está bueno ya y que

mañana…Un beso S/