Juan Marcelino Ruiz

Juan Marcelino Ruiz, profesor y escritor mexicano nacido en Ciudad Juárez, ha enviado a Letras de Chile algunos microcuentos.

Actualmente vive en Ciudad Cuauhtémoc, lugar donde trabajó como profesor de educación primaria. Publica en diarios del norte y centro del país, y ha participado en encuentros literarios en México y España. Algunas de sus obras son: Derrepentes (poesía), Quinteto para un Pretérito (poesía), Del Aleph a Guernica (cuentos), El Hormiguero (novela), Delitos Menores (relatos breves) y Vino Tinta (poesía).

CUENTO CHINO

Antes de partir a la guerra, Mun-Wah juró que volvería cuando comenzaran a florecer las ramas del naranjo.

Bajo el amparo de aquella promesa, con la vista clavada en el poniente y las mejillas pintadas de carmín, Jiang Li espera el regreso de su prometido sobre una de las torres de la Gran Muralla.

A la distancia, la joven advierte la presencia de un jinete, apenas un punto rasgando la tranquilidad del horizonte; es él, lo reconoce por el estandarte de batalla atado a sus espaldas. Cuando se acerca, se da cuenta que el caballo no toca el suelo con sus patas, en su galope silencioso no se detiene ni tuerce el rumbo hacia la puerta que comienza a abrirse.

Casi a punto de estrellarse contra el muro, hombre y corcel se elevan por los aires, se vuelven humo, mientras una fina lluvia de pétalos de azahar se funde con el llanto de Jiang Li.

EL LOCO QUE DEJÓ DE SER FELIZ

Desde el mismo momento de nacer ya no era cuerdo, fue creciendo como lo hace cualquier loco, y todos pensaban que, sin lugar a dudas, ya de viejo seguiría igual. Como buen loco, era un tipo feliz, con todo y que su felicidad doliera a tantos.

Pero un día, para su mala suerte, se dio cuenta de que existían otros locos, y entonces, nació en él ese afán tan común entre todos los normales por ser mejor a los demás. Desde ese día hasta la fecha se ha convertido en un loco preocupado, y en su enorme esfuerzo por ser el mejor loco entre los locos, no se le ha vuelto a ver en el rostro la sonrisa de antaño.