Iván Soto Bustos (Santiago, 1990), odontólogo de la Universidad de Chile, especializado en Periodoncia. Trabajó en atención primaria de salud en Illapel hasta el año 2022. Su cercanía con el ambiente rural de la cuarta región, y la llegada de la pandemia por el COVID-19 lo hizo acercarse a la poesía, participando en diversos talleres de escritura. Los invitamos a leer algunos de sus poemas.

AVARICIA

Un camión aljibe se estaciona
en una escuela rural del norte
lo ven llegar los niños
la profesora se pone de pie
pone orden y deja la sala

Dos veces por semana pasa el camión aljibe
el embalse se secó
ya no sale más agua del grifo
la tierra, una cáscara de nuez

Hablé un día contigo y me dijiste
que cuando eras niña, te bañabas en el río
y que jugabas con tus amigos
el embalse lleno de agua
y muchas aves se acercaban a buscar alimento
no esperaba encontrar en aquella añoranza
cierto dejo de rabia
ruegas a Dios lluvia para este año
ruegas al dios de la lluvia
ya que ahora ese don fue quitado
y se reemplazó
por un camión aljibe
dos veces por semana

VI

Un primer gráfico representa el aumento en la temperatura global en los últimos cincuenta años. 

A veces me confundo acerca de la eficiencia
implicancias sobre nuestros
patrones de consumo
occidental

A veces me perturba lo que entendemos por sociedad moderna
tal vez podría llamarlo sociedad última
ya que tenemos poco tiempo y
una última oportunidad
o será el fin
nuestro

Un segundo gráfico muestra la pérdida de biodiversidad en los últimos cincuenta años. 

Siento un poco de miedo al ver el mapa
que muestra lo inevitable y desolador
que podría llegar a ser el infierno
nuestra caída fue hace tiempo
y con ella arrastramos
hasta el último piso
el castigo

VII

La Tortuga Marina me ha invitado 
a su palacio
me sumerjo y respiro bajo el agua
bajo el océano veo gris
veo el alga que invade el coral
y no deja pasar la luz

Siento el viaje de Urashima
el paso del tiempo
la Tortuga Marina es la princesa
yo un hombre perdido

La caja de Pandora se abre 
ante nuestros ojos
todos podemos verla
nadie quiere cerrarla

Aumenta la acidez del océano
la pesca de atún
la muerte de los delfines
ya no puedo volver
me vuelvo anciano
y veo mi tumba

SOBERBIA

No importan las mil y un justificaciones
para respaldar el desmonte
y arrancar la raíz
el micelio nos oye
un micelio, una neurona
tejido subterráneo
que nuestros pies pisan

El micelio oye
atentamente nuestra intención
de reemplazarlo por una carretera
unirá dos ciudades
que en veinte años
serán abandonadas
por falta de trabajo
y falta de agua

D E S C O N E X I Ó N

¿Ignoras su señal?

PEREZA

Me escondo en la oquedad 
de un tronco viejo
hasta que anochece

¿Qué hay cuando no hay sol?

El espejo no refleja nada
siento el olor del pino y de la tierra

Escucho otra voz que me dice que no se puede talar el pino, que hay que talar otros árboles primero, para plantar nuevos pinos. Pregunto por qué la contradicción. La voz me responde que hay cosas que no pueden separarse, que se atraen de manera muy fuerte. Luego pienso en la tierra estéril y un pino talado. Doy un grito como si estuviera en un sueño.

¿Has intentado correr en un sueño?