Sobrecogida de angustia, sin atreverse a modular su cacareo vulgar, tendió el cuello orientándose, mientras las demás aves lanzaban al unísono un cloqueo sonoro que a la recién llegada le hizo la impresión de una carcajada burlona.
La Pachacha, de Rafael Maluenda (Santiago,1885-1963). Primer Premio Nacional de Periodismo (1954). AQUÍ.
Se reproduce este cuento con la autorización de María Teresa Maluenda Merino.
Cualquier parecido con la realidad sólo coincidencia.