José O. Paredes ha publicado en poesía: Autos de Fe (1983); La separación de los amantes (1990); Viaje a Ithaca (1993); Firmamento y olas (2008); Pasión de la Memoria (2012). If –bilingüe (2013).

Reside en Silver Spring, Estados Unidos. “Acto de Fe de Luis de León” fue publicado en la antología-homenaje “Decíamos ayer” a Fray Luis de León; Salamanca, España.

Acto de Fe de Luis de León

 

Por José O. Paredes

a Jorge Aguilar Mora

El martirio acepté, aunque injusto era; por el Libro

lo hice, y porque creo en Ti acepté la celda, pero no

la blasfemia y el delirio de los que tuviéronme en el ojo

de la hoguera. Para estar más cerca de ti, mi Cristo,

lo hice: De tu palabra y su sabor, su fervor y magisterio;

ascendí a ella para que me alumbrases de Fe y así, yo,

pudiese deslumbrar a los que no llegaban a tu Luz;

para hacerlos más tuyos, a tus feligreses, desde tu voz.

 

¿Sabes, mi Señor?: No tenían, aquellas almas, tu alfabeto.

Algo sabían de Ti por medio de los doctos; sólo algo, nada

más: Por eso los acerqué, con amor, al amor de tu palabra,

sin nadie de por medio. Por esa razón traduje tu Verbo

sabio, para acercarlo al todo de tus fieles, ignaros del decir

de la letra que contiene tu enseñanza: Por ello fue, mi Pastor,

el castigo abyecto que me dieron. ¡Yo no era sacrílego!

Sólo te acercaba a esas almas vivas, como llegaba yo a Ti.

 

Tú, eras vivo en mí porque era hombre docto, por herencia,

en la lengua prohibida: En ‘ellos’, mi pasado reciente

era una condena; esta fabla, ‘maldita’ según su decir,

estaba viva en mi sangre – algo tuvo que ver en mi caída.

Por eso, años de cilicio dimos a mi espalda; por expropiar   

tu palabra del poder de los letrados tuve el castigo, ¿por qué

más? Aquellos doctores practicaban la ‘doctrina de la fe’

¡sin piedad! e incendiaron, arteros, los campos de Castilla.

 

Tú me entiendes, lo sé; por esa ‘causa’ me dieron ‘auto de fe’.

¡Pero no fui cordero! Maestro aprendí a ser desde tu Luz; sí.

Más vivo en Ti estuve: Mi sala, mis alumnos y  los que no

me vendieron por unas monedas, me esperaron. Y os digo hoy,

con más fe, como lo dijimos ayer: ¡Todo en mí a su bosque iba!

Y a ‘mi’ Cantar de Cantares; ahora, nos pertenece a todos.

 

***

 Silver Spring, 28-30 de julio de 2013