“En estos cuentos producen el necesario equilibrio narrativo entre calles y casas que languidecen inexorablemente y la rebeldía de sus moradores frente a la derrota del barrio. Y no menos importante es la calidad de la mirada que las contempla, haciéndonos sonreír las más de las veces, como cuando vemos a una pareja que “de carrerita” se mete a un hotel galante de Ricardo Cumming”
JOSE PROMIS. “Revista de Libros del Mercurio. 31 /agosto 2008.
“Los relatos son directos, adobados a veces, en fantasías e imaginación. Rolando Rojo es un cuentista prestigioso, tiene oficio y discurre dentro de la tradición realista. Sus desvíos hacia el naturalismo no son siempre afortunados. Pero lo que importa es que sus cuentos tienen fuerza, humanidad, garra.”
ANTONIO J. SALGADO. Revista “Punto Final”. Santiago, octubre 2008.
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“En estos cuentos chilenísimos hay una cruda desesperación siempre al límite del humor. Sus personajes intentan una salvación, un éxito, un encuentro, una fuga. En ese mismo áspero Buenos Aires del más breve de los exilios, sucede una notable narración erótica: una pareja de solitarios: onda pensionistas, tango y bolero- un chileno y una argentina- se descubren en una milonga hecha para contactar almas solteras, en los sábados bailables del viejo Excelsior, y cierra la noche amándose con desacato en el ombú gigante de la plaza San Martín.
FERNANDA DONOSO. “La Nación” 9 de septiembre 2008.
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“Vecino del barrio Yungay, la mayoría de las historias de este libro transitan por esas calles, entre casonas deterioradas, pensiones añosas, cités. O se trasladan al centro, al Portal Fernández Concha y la Plaza de Armas. Sus personajes suelen ser obreros, profesores alcohólicos, aspirantes a escritores y viejos verdes. Ambientados entre los años 40 y 70, sus relatos arman el mapa de un Santiago que ya no existe, funcionan como postales de otra época, en blanco y negro, fotograma de una ciudad agónica y extinta.”
AGB. La Tercera 16 de agosto 2008.
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“El inagotable Rolando Rojo vuelve a entregarnos una buena partida de cuentos de su notable pluma. “Cuentos de Barrios” (Bravo y Allende Editores)…Rojo se las arregla para seguir contando historias que en el caso de “Cuentos de Barrios” nos hablan de barrios que se resisten a morir, de iglesias habitadas por recuerdos, de cines de espectros en las butacas, de aventuras prostibularias de una juventud en llamas…”
LA NACION. 29 DE ABRIL 2008
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“Rolando Rojo nos invita a recorrer sus barrios que la vida le hizo recorrer. Con nostalgia y humor nos hace penetrar en viejas casonas, calles y cines rotativos hoy ya desaparecidos. Y, a través de ellos, nos presenta a los personajes de aquellos lugares con sus angustias, sus sueños y tristezas.
LOS LIBROS DEL MES. “Le Monde diplomatique
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“Si algo tiene claro el autor para lograr un buen cuento son los tres elementos básicos que menciona Cortázar: el significante, la intensidad y la tensión. Y yo aportaría la anécdota, la atmósfera, el lenguaje, la verosimilitud, la autenticidad, la vida casi palpable en cada relato, la sensación de complicidad con los personajes. En cada texto se respira vida, se percibe el fluir de la urbe, se muestra la marginalidad poco grata para el buen burgués, una periferia que no concuerda con los aires triunfalistas del neoliberalismo chilensis. Son seres de carne y hueso que pasan por nuestro lado y tratamos de evitar, de tornarlos invisibles…”
Ramiro Rivas. Revista “Punto Final” Santiago, abril del 2008.
El análisis no solo es preciso en cuanto a los elementos identificados, sino también bastante concreto al momento de expresar…