Eduardo Gotthelf: un microcuentista en  la Cumbre de Copenhague

Con su humor notable y su caracterítica agudez, el micorrelatista argentino Eduardo Gotthelf nos da su visión esperanzada del evento.

MAÑANA

Cuando la cucaracha despertó, la humanidad ya no estaba allí.

FUTURO IMPERFECTO

La atmósfera contaminada ya no pudo detener los rayos nocivos. Protegidos por sus trajes de piel de oso, sólo los esquimales sobrevivieron.

Ahora son los únicos habitantes de la Tierra. Pero no son felices: de noche la temperatura mínima es de cuarenta y tres grados centígrados.

De día, en cambio, hace calor.

 

MEDIOS

Ayer supimos que la Humanidad va a desaparecer este fin de semana, a causa de la contaminación que generó.

La radio, la televisión y los diarios explican que es necesario restablecer el equilibrio ecológico, y que debemos aceptar este sacrificio para que las demás especies puedan sobrevivir.

En esta última instancia, los medios justifican el fin.

 

MÁXIMO GALARDON

Pocas especies sobreviven al cataclismo. Una de ellas evoluciona rápidamente, sus individuos aumentan de tamaño y se hacen inteligentes. Desarrollan la ciencia, dominan la tecnología, cultivan el arte.

Todos los años, quienes hayan realizado investigaciones sobresalientes, inventado técnicas revolucionarias o hecho contribuciones notables a la sociedad, reciben un “Gregor Samsa”, el premio más importante al que pueda aspirar un cucarachón.

 

Eduardo Gotthelf (Buenos Aires, 1945), vive en la Patagonia desde 1974. Cursó estudios universitarios en Santa Fe y Mendoza. Como Ingeniero de Petróleos se desempeñó en distintos puntos del país. Actualmente realiza trabajos de consultoría. Sus trabajos están recogidos en antologías, revistas y publicaciones diversas.

Publicaciones: El sueño robado y otros sueños, (Cuentos cortos), Ediciones Culturales de Mendoza, 1995. Cuentos Pendientes, (Minificción) Editorial Ruedamares, 2007.