CUANDO IBA EN CIENTO TRES
(Décima parriana)

EN LA QUE, A CINCO AÑOS DE LA MUERTE DEL POETA, DOY A CONOCER ESTE HOMENAJE –INÉDITO– ESCRITO EN 2018:

A mi amigo, el actor Mario Lorca Aguilar, activista poético.

Cuando iba en ciento tres
declaró Nicanor Parra:
“¡otra cosa es con guitarra!”,
paró la cola y se fue.
¡“Voy y vuelvo”! —su merced
dejó su advertencia escrita—,
“No me hagan animitas
al medio’ e la plaza-fuerte;
ora voy donde la Muerte
para fregarle la pita”.

—“¡Qué es de tu vida, chiquilla!”
—dicen que dijo al llegar—
“¡Ponte un vino pa’ escanciar
y pebre con sopaipillas!”
La Pelá estaba en su silla
más seria que perro en bote
pues le llegó este pegote
a complicarle la vida
hablando de poesida,
de Shakespeare y del Quijote.

—“¡Qué te creís, confianzuo!
tiéneme un poco’e respeto:
Yo no estoy pa’ tu coleto!
¡Chitas, el viejo patúo!”
—“¡Flaca car’e zancudo,
no te me hagai la fruncía:
prepárame de comía
unas buenas empanadas,
después una carbonada
y a la siesta serás mía”!

La muerte no halla qué hacer
pues la tomó de sorpresa
y se toma la cabeza
apunto de enloquecer.
Al cabo, pa’ distraer,
—la muerte tiene sus tretas—,
le va a mostrar la carpeta
donde nos tiene anotados:
Dice don Nica, espantado:
“¡No digai que sos poeta!”

“¡Qué voy a ser poetisa!
–dice cerrando el cuaderno–,
“¡me quejaré al Padre Eterno
que este viejo me desquicia.
¡Puchas, la mala noticia,
—dice la Parca, enojada—,
sucede que no esperaba
que llegarai tan aprisa.
Si yo fuera pitonisa
no me pillai despeiná!

EPÍLOGO

Dicen: “murió Nicanor”
y no sé a qué se refieren
pues los poetas no mueren
si es rotunda su labor.
Este preclaro señor
dejó escrito “voy y vuelvo”
dando un mentís a ese cuervo
que exclamaba “¡Nunca más!”
Su obra perdurará
testimoniando su acervo.

Santiago, 25 de enero de 2018 / 23 de enero de 2023