PelourinhoPor Julio-César Ibarra

Salvador de Bahía, se vende en Chile como un Paraíso, pero como todos los paraísos hay que sangrar para alcanzarlo.

Cada vez que voy a una ciudad voy a la biblioteca, es así como me entero del pasado y del presente del lugar. Mientras el resto de Brasil proclamaba su independencia, y con ella, la abolición de la esclavitud,  Salvador de Bahía quedaba excluida de esta emancipación. Bahía tiene la mayor cantidad de población afro-brasileira, sólo el 7% de la población es blanca de origen europeo.

Bahía es una tierra inmensamente rica, en ella se encuentran diamantes, oro, maderas preciosas, sólo hacía falta la fuerza de los esclavos para volver ricos a sus dueños, por eso los esclavos tuvieron que luchar a favor de su libertad, primero contra el imperio de Portugal y luego contra el yugo de Brasil.

En Brasil, los cultos son conocidos como candomblé, xango, macumba, batuque y umbanda.  En Puerto Rico, Cuba y las comunidades de inmigrantes latino caribeños de los Estados Unidos son conocidos como santería y a los iniciados se les llama santeros. Asimismo centenares de africanos, mestizos y blancos, a través del Atlántico Sur, sacrifican, homenajean y testimonian la encarnación de dioses conocidos como orisa, iorubá, oricha en español, orixá en portugués.

Iglesia de San FranciscoSegún la mitología iorubá, Xangó, fue gobernador del OYO imperio iorubá (dios del trueno), Ogún, dios del fuego, la guerra y la caza, fue un día gobernador de ILE- IFE, otro importante reino iorubá.

Los dioses Iemanjá, Orum y Oya fueron madres y esposas reales; Odudua y Obatalá fundaron los primeros reinos terrestres y fueron gobernantes de los estados iorubás posteriores. En el imperio de OYO,  los sacerdotes de Xangó eran virreyes del emperados y en las provincias lejanas ejercían la autoridad superior.  Las sacerdotisas y mensajeros reales eran llamados ILARI, son preparados a la manera de los sacerdotes medievales, recolectan impuestos e imponen el orden del rey.

Los afro-brasileiros conservaron su religión y costumbres en los ‘quilombos’, aldeas construidas por esclavos que huían para vivir en libertad, el quilombo más importante fue el de Palmares, que llegó a cobijar a 20.000 personas, entre africanos, mestizos, indios y algunos blancos. Palmares fue destruida en 1694 por los portugueses y hacía 1710 todos los quilombos fueron aniquilados.

Según Vadinho, nuestro guía, los afro-brasileros no se meten con los blancos, y ellos tampoco con ellos.

La biblioteca a la que asisto está en medio del Pelourinho, barrio declarado ‘patrimonio de la humanidad’, en el cual existe un conjunto de iglesias de estilo barroco, enchapadas en oro, que habla de la riqueza de esta tierra y de las abominaciones que se cometieron en ella.  Un ejemplo de esto, es la iglesia de San Francisco, en donde el boato se contradice con las austeras costumbres del santo. Los habitantes de Bahía, tanto rezan a san Francisco como a Iemanjá, la diosa del mar, ambos coexisten sin problemas entre ellos.

Casa de Jorge Amado en PelourinhoEn Pelourinho encontramos también la casa de la Fundación del escritor Jorge Amado, el más universal de todos los brasileros, que escribió «Gabriela, Clavo y Canela» (1958) ¿quién no recuerda la película «Doña Flor y sus dos maridos» basada en la novela del mismo nombre?  La misma que lanzó al estrellato a Sonia Braga. Amado se metió en la cultura popular de América Latina con telenovelas tan populares como «Tieta de Ageste» o la misma «Doña Flor».  El escritor argentino, Mempo Giardinelli, dice que Jorge Amado, Jorge Luis Borges y Juan Rulfo son los precursores del «Boom Latinoamericano».  Es una alegría inmensa caminar por estas calles, donde caminan personajes como Quincas Berro de Agua de la mano de la libertad con la que tanto soñamos.

En libertad se siente uno cuando prueba las playas de Bahía, el agua es calentita y transparente, como para mojarse en ella una y otra vez, es así cuando estamos en la Isla de los Frailes, en donde el mundo se detiene y uno está solo con el mar, en una unión cósmica, es un placer bañarse en esas aguas.

 Mi mujer y yo disfrutamos de los famosos bolsos de Bahía, nos hicimos de dos portadocumentos iguales, que todavía tenemos y también de la música, esta tierra cuenta con exponentes famosos como Caetano Veloso y su hermana María Bethania, Gal Costa y Gilberto Gil. Durante la dictadura militar en Brasil, Caetano formó parte junto a su amigo y colega Gilberto Gil en el movimiento socio-político y artístico Tropicalia. Juntos revolucionaron la música brasileña, llenándola de color, protesta y mucha saudade.

Así, por todo esto caminar por las calles de Bahía es un placer, caminar en libertad, caminar soñando, «caminando y cantando» como diría Gerardo Vandré.

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Blog de Julio César Ibarra: http://juliocesaribarra.blogspot.com/