Por VHL

…En una revista Araucaria de fines de los años setenta ó inicios de los ochenta, venían unos poemas que hablaban de un tiempo que transcurría al revés. En esos años varias veces tuve la sensación que sorpresivamente Víctor Jara aparecería en el escenario de algún acto, pero en medio de ese religioso autismo al que obligaba la época, nunca comenté con alguien estos poemas ni menos esa sensación, sin embargo seguí buscando-leyendo al autor y manteniendo ese tipo de sensaciones.

El año pasado viendo el documental de Patricio Guzmán «Allende», escuche el tipo de poemas que veinticinco años atrás había leído y volví a vivir similares sensaciones, teniendo ahora a los años ochenta como pasado.

En la última escena del documental un hombre con calmo desenfado lee un poema, lee sin poner mucho la mirada en el texto, levanta la vista así como anunciando un descubrimiento y pronuncia el texto a la manera de una denuncia: «el pasado no pasa».

Tengo la sensación que al salir del cine algún día me reencontraré con entrañables amigos ya fallecidos, como el flaco Jaime Valdés ó el lobito Frías.

Al día siguiente de ver el documental, busque con el google uno de los versos que tenía en la memoria: «Víctor Jara toca la guitarra. Canta», así reencontré el nombre de Gonzalo Millán y el texto completo de su libro «La Ciudad». Entre al youtube y encontre el video de la escena antes mencionada.
La única vez que creo haber visto personalmente a Gonzalo Millán, fue el día de la inauguración de la última «exposición de poemas» de Nicanor Parra, digo creo haber visto, porque no estoy seguro que fuera la misma persona del documental, se veía envejecido muy distinto, como ajeno al evento. Le encontré cierto parecido al Jaime Valdés que vi por última vez.

Gonzalo Millán un poeta que se hizo en 60 años, murió el Sábado 14 de Octubre de 2006.
Que duda cabe, se harán ahora los reconocimientos que no se hicieron en su momento, seguramente en las librerías aparecerán sus libros, nada de extrañar si comenzamos a recibir convocatorias para homenajes. Es probable que se escriban o destaquen muchos ensayos, tesis magistrales y doctorales. Reportajes habrá posiblemente en revistas, diarios, paginas web, fotologs, blogs y columnas como esta misma.

¿Será su muerte como su libro, en que el tiempo transcurre al revés?.

Tal vez Gonzalo Millán como todo auténtico poeta del pasado traerá futuro, a lo mejor porque «el tiempo existe para que no ocurra todo simultáneamente».

Sea como sea, parece no haber novedad, ha ocurrido antes, a su muerte nace el poeta…

El atleta alcanza la meta.
El andinista alcanza la cumbre.
Al final de la vía ferrea hay un tope.
El microbus llega al terminal.
El poema llega a su término.
El anciano finaliza el poema.
Termina su vida.
El anciano testa.
El poema es su testamento.
No puede adivinarse el porvenir.
El año 2000 será bisiesto.
Febrero tiene 28 días los años comunes
Febrero tiene 29 días los años bisiestos.
Será bisiesto el año 1996.
Bisiesto será el año 1992.
El año 1988 será bisiesto.
Será bisiesto el año 1984.
Bisiesto será el año 1980.

El anciano aún respira.
El anciano está en sus postrimerías.
Estos son los versos postrimeros:

Y después de ir con los ojos cerrados
por la oscuridad que nos lleva,
Abrir los ojos y ver la oscuridad que nos lleva
Con los ojos abiertos y cerrar los ojos.
Se cierra el poema.